
El papa León XIV celebró su primera Navidad desde su elección expresando su profunda preocupación por el sufrimiento de los ciudadanos de Gaza, quienes se ven obligados a refugiarse en tiendas de campaña ante la “lluvia, el viento y el frío”. Asimismo, hizo un llamado urgente a cesar el fuego en el conflicto de Ucrania.
Durante la celebración navideña, el primer papa nacido en Estados Unidos otorgó la tradicional bendición Urbi et Orbi (“A la ciudad y al mundo”) desde el balcón de San Pedro, reflexionando sobre la situación conflictiva que abarca desde Yemen hasta Myanmar.
El pontífice hizo un llamado a la compasión hacia aquellos que han huido de sus hogares en busca de un futuro mejor en Europa y EE.UU.
León XIV, quien asumió su cargo el 8 de mayo, subrayó el jueves que Jesucristo representa “nuestra paz”, ya que “nos indica el camino para superar los conflictos, tanto interpersonales como internacionales. Con su gracia, podemos y debemos esforzarnos cada día por rechazar el odio, la violencia y la confrontación, y promover el diálogo, la paz y la reconciliación”.
El líder religioso pidió justicia, paz y estabilidad para Líbano, territorios palestinos, Israel y Siria. Destacó que la encarnación de Jesús al asumir la condición humana le permite identificarse con quienes han perdido todo, refiriéndose a los habitantes de Gaza.
La primera Navidad del papa, marcada por condiciones climáticas adversas, no impidió que miles de personas acudieran a escuchar su mensaje. Durante la misa, preguntó: “¿Cómo en Navidad podemos ignorar las tiendas de campaña en Gaza, expuestas durante semanas a la lluvia y el frío?”. Con más de 400,000 hogares destruidos por la guerra entre Israel y Hamas, los residentes de Gaza deben elegir entre vivir en precariedad o en edificaciones en riesgo de colapso.
“Frágil es la carne de los pueblos indefensos, marcados por guerras pasadas y presentes, que dejan tras de sí escombros y cicatrices abiertas”, expresó León XIV.
Posteriormente, en su mensaje de Navidad, llamó a la compasión hacia aquellos “que huyen de su patria, como muchos refugiados y migrantes que cruzan el Mediterráneo o atraviesan el continente americano”. Desde su elección, León XIV ha subrayado la difícil situación que enfrentan quienes sufren en Gaza y ha reclamado abiertamente un trato más humano hacia los migrantes.
En su primera columna importante en septiembre, el papa estadounidense manifestó su inquietud acerca de “algunas realidades” en su país natal, haciendo hincapié en la carta de su predecesor, el papa Francisco, que criticaba los planes de deportación del gobierno estadounidense.
León XIV también utilizó su mensaje navideño para orar por el pueblo de Ucrania, que enfrenta la invasión rusa desde hace casi cuatro años. “Que cese el clamor de las armas, y que todas las partes involucradas, con el respaldo de la comunidad internacional, encuentren el valor para establecer un diálogo sincero y respetuoso”, afirmó.
Las celebraciones navideñas comenzaron con la “Misa de medianoche” en una Basílica de San Pedro colmada, donde asistieron numerosos cardenales. Jovenes de Corea del Sur, India, Mozambique, Paraguay, Polonia y Ucrania llevaron flores y acompañaron al papa en procesión hacia el pesebre.
El Vaticano reportó una asistencia de 6,000 personas en la Basílica y 5,000 en la plaza, muchas de las cuales se protegieron de la lluvia con paraguas.
El pontífice agradeció a los presentes su valentía al asistir, a pesar del mal tiempo: “Los admiro, los respeto y les agradezco por su disposición a estar aquí esta noche”. En su homilía, León XIV reflexionó sobre la sabiduría del relato navideño, planteándose: “Mientras la humanidad anhela convertirse en ‘Dios’ para dominar a otros, Dios elige hacerse hombre para liberarnos de toda esclavitud. ¿Será este amor suficiente para transformar nuestra historia?”.
Un día antes, el papa expresó su profundo pesar por la falta de consenso entre Rusia y Ucrania sobre una tregua navideña, anhelando al menos 24 horas de paz.
Desde su elección en mayo, León XIV ha mantenido diálogos con el presidente Volodymyr Zelensky y ha ofrecido al Vaticano como mediador para las negociaciones de paz con Rusia, una propuesta que Moscú no ha aceptado.
Siguiendo el ejemplo de sus predecesores, León XIV ha centrado su labor en la pacificación y en una tarjeta emitida por la Casa Pontificia expresó: “La Navidad del Señor es la Navidad de la Paz”.
El papa, de 70 años, el pontífice más joven desde Juan Pablo II, ha presidido más ceremonias navideñas que sus predecesores, reestableciendo la tradición de celebrar una misa el día de Navidad por primera vez desde 1994.
El servicio de Nochebuena del papa comenzó a las 22:00, hora de Roma, una hora más tarde que en años anteriores. La misa se había adelantado a las 19:00 durante la pandemia de covid-19, pero ahora se ha mantenido a la hora retrasada a partir de 2009.
La Plaza de San Pedro ha sido adornada con un belén de la diócesis de Nocera Inferiore-Sarno, ubicado en Campania, y un árbol navideño de 25 metros de altura proveniente de Val d’Ultimo en Bolzano.
Además, la Plaza Santa Pedro alberga una exposición de más de 100 belenes de diferentes partes del mundo, incluyendo uno de Chicago, la ciudad natal del papa León XIV, y otro de Perú, donde sirvió como misionero y obispo durante varios años.
El período navideño también marca el final oficial del año jubilar de la Iglesia Católica, un tiempo dedicado a la renovación espiritual y el perdón, que se celebra cada 25 años. Las “puertas santas” de las cuatro basílicas papales se cerrarán en los próximos días, y León XIV presidirá la clausura de la puerta santa en San Pedro el 6 de enero de 2026.
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Fuente original: Noticias El Paso
Por Alan Tiscareno
25 Dec, 2025


